Escaleras. Las preguntas que no nos hacemos
¿Para qué te sirve?
Un curioso y simple anuncio para darnos cuenta de cómo a veces nuestro mayor límite somos nosotros mismos. Este vídeo tiene varias lecturas, aunque es tan amplio que cada uno podría elegir la suya. Sobre barreras invisibles que no existen más que en nuestra cabeza. Sobre los límites que nos marcamos nosotros mismos y que nos impiden pensar a lo grande. Sobre dejar la responsabilidad de ser mejores o de ser más felices en los demás. Sobre cómo las prisas pueden cegarnos oportunidades en nuestro entorno y hacernos más individualistas.
Compartimos este vídeo en la @pinkslippartyes a la que fuimos invitadas el 14 de octubre de 2013. Muchas gracias a todos por vuestras aportaciones, con ellas hemos conformado la explicación del vídeo. Una de las cosas que señalamos en la sesión es que, desde nuestro punto de vista, a los protagonistas les ha faltado hacerse una o más buenas preguntas. ¿Qué podemos hacer para salir de aquí? ¿Qué está en nuestra mano?
Algunas de las aportaciones de los participantes fueron «la parálisis por el análisis», «la solución está en nosotros mismos». @PACOTAMAYOAV hacía también una lectura interesante: «¿nos hemos malacostumbrado a que hagan las cosas por nosotros?»
Reflexiona y actúa
Y a ti, ¿qué te sugiere el vídeo? ¿Qué limita a los protagonistas? ¿Qué habrías hecho tú en la misma situación? ¿Quieres ser víctima o responsable de tu vida? ¿Cuáles son las escaleras que no te atreves a subir? ¿Qué te impide hacerlo? ¿Qué te limita? ¿Hasta qué punto eso que te limita tiene fundamento?
Amplía información
Recomendamos el post de @JoseLdelCampo «Las limitaciones nos las imponemos nosotros mismos»
También esta charla TED de Caroline Casey «Mirando los límites del pasado»
Y por último, la Fábula de la Vaca, para descubrir aquello que nos impide ser mejores y «tirarlo por el precipicio»
Muchas gracias a todos los que nos acompañasteis en la @pinkslippartyes ¡Gracias por vuestras aportaciones y por entrar en el juego que os habíamos preparado! ¡Si se os quedó algo en el tintero podéis escribirnos a info@estimulando.com
Imagen por 11Rue
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3 comentarios
Gracias por la mención amiga Mónica.
Un abrazo!!
Os propongo otro punto de vista.
Esas personas tienen algún tipo de discapacidad, no existen ascensor o rampa como alternativa y han cogido la escalera mecánica. Se para y no pueden subir, no es que no quieran, sino que NO PUEDEN…
Discapacidad física: es más fácil ver las evidencias de la dificultad;
Discapacidad sensorial: Podría, creo desde mi humilde opinión que podría salir del atolladero;
Discapacidad intelectual: Podría crear crisis… Por qué se para? Qué hago? Subo, bajo, espero? Está prohibido?
Os quiero transmitir la importancia de la accesibilidad en la comunicación vertical, la importancia del apoyo de las alternativas (ascensores, escaleras no mecánicas, rampas, …) o del personal de apoyo en caso en que no las haya…
No me extiendo más, ahí lo dejo…
Saludos.
Hola Fernando, perdónanos, acabo de ver este comentario, un poco tarde, tan solo 5 años después y me encanta tu mirada porque complementa la redacción más allá de los conceptos de víctima y responsable. Me hace pensar de una manera más inclusiva, a veces siento que Estimulando se queda mucho en el lenguaje y situaciones de empresa (donde tenemos contexto). Además, no sé apenas nada sobre discapacidad intelectual. Hace poco recibimos un taller de accesibilidad cognitiva del que aprendí mucho en la Fundación Juan XXIII Roncalli. Mil gracias y siento el retraso, no sé si llegarás a leer mi mensaje!